Ya sabe cómo va esto; casi inexplicablemente se enredan los pensamientos con el sonido de la gravilla tras tu paso y a medida que aprietas la marcha más vueltas le das y lo que en un principio es una fugaz reflexión se hace un nudo por dentro y te incomodas por tu falta de aporte a la humanidad y en una simulación casi de huida de pronto das de bruces con un vehículo todoterreno de alta gama estacionado hasta las trancas de polvo y te sorprendes dibujando en la luna trasera un mirífico mensaje transcendental tal que así: ‘con menos tierra se siembran patatas’ ilustrado tal aforismo con un puñado de esas pollas pueriles que se perfilan sin levantar el lápiz adornando los márgenes de apuntes adolescentes que aún, a día de hoy, me entusiasma plasmar allí donde fuere y con el corazón en la boca embriagada por la emoción sé que por todo esto pasaré a la posteridad.
Y usted, ¿cuál es su contribución para hacer de esta vida menos gris?